A veces pienso a dónde irán las buenas ideas, o los buenos sentimientos...
Pienso que tal vez exista un rincón en el planeta o en el firmamento en el que están amontonados, sin orden ni catálogo alguno y... que esperan a ser revividas, y rescatadas del olvido...
A veces pienso en que hay una idea genial, que espera a ser renacida, o momentos maravillos que aspiran a ser revividos...
Pero que el rumbo de nuestras vidas es tal, que de no ser que tengas fijaciones u obsesiones, que por supuesto las tenemos, las ideas se quedan en el ese gran lago que habita entre el consciente, el inconsciente y las necesidades de producción...
A veces te asaltan las chispas que salen del lago como un octopussi y te atrapan... Y es cuando piensas en que la cagaste, burtlancaster.
domingo, 21 de junio de 2009
domingo, 14 de junio de 2009
Un cielo lleno de aerolíneas
En mi pueblete hay muchas aerolíneas que cruzan el jardín. Sobre todo pájaros e insectos de diferentes especies. supongo que unos vivirán en paz con los otros y otros serán depredadores de algunos de ellos. Mariposas, chobos, torcaces, golondrinas, y un sin fin de bichos de tamaño más pequeño, aunque más molestos a los que sólo a los más conocidos sé ponerles nombre: Moscas comunes, abejorros y avispas. Arañas de patas muy largas y hormigas pequeñas, grandes y gigantes, con y sin alas.
Reconozco que cada vez me gusta más mirar a una mosca, o cómo liba una avispa o la magnificiencia de un saltamontes palmero... Eso sí que es una buena bestia. También vuelan a sus alturas determinadas y a sus velocidades diferentes, y, sus momentos más sonados a lo largo del día: en el caso de los pájaros, debe ser al amanecer ya que esta noche en vez de contar ovejas contaba al menos ocho o nueve píos diferentes, y traduzco alguno de ellos: ...Ven a mi nido esta noche, pajarita o ¡Tengo hambre, mamá, no seas pájara!... O ¡Maldito gusano!
En fin, que cosas así oía.
Reconozco que cada vez me gusta más mirar a una mosca, o cómo liba una avispa o la magnificiencia de un saltamontes palmero... Eso sí que es una buena bestia. También vuelan a sus alturas determinadas y a sus velocidades diferentes, y, sus momentos más sonados a lo largo del día: en el caso de los pájaros, debe ser al amanecer ya que esta noche en vez de contar ovejas contaba al menos ocho o nueve píos diferentes, y traduzco alguno de ellos: ...Ven a mi nido esta noche, pajarita o ¡Tengo hambre, mamá, no seas pájara!... O ¡Maldito gusano!
En fin, que cosas así oía.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)